Aguas con el verbo

Bueno, bueno... en vista de la insistente petición del carnalón a que me aviente una anécdota sexosa y en vista también de que el sirkov casi nos quiere nalguear para que posteemos, me tuve que echar un clavado en el archivo muerto de mi experiencia laboral.

Ora... como antecedente les cuento que me criaron en un monasterio, donde mi enorme talento fue detectado por la madre Iglesia que me entrenó y afiló mis múltiples aptitudes para fines propios, total...

Soy eficiente, más no perfecta y hace algunos añillos...





Luego, mientras su servidora se divertía baleando gatitos y perros callejeros:




And then:



Luego, la imagen que le dio la vuelta al mundo y todos malinterpretaron:



Pero bueno... no todo fue pérdida (o al menos para mí), don senecto se puso tieso (en el peor de los sentidos) antes de ver su sueño hecho realidad, después del incidente, el Vaticano le agarró el lado bueno y ahora tenemos material para manipular a medio orbe político... una vida de trabajo y sacrificios... cuyos detalles revelaré sólo al mejor postor, eso si me superan la tarifa de la Doña Madame Iglesia Católica Apostólica Romana... lo cual dudo, así que no me queda más que disfrutar dejarlos con la duda.

Comulguen y no olviden pasar a dejar su diezmito, que ya me urge lencería nueva.